Nueva campaña de Plantas Verdes Mexicanas contra el acoso laboral

Los miembros del colectivo mexicano de actores de videojuegos se han movilizado comenzando por las redes sociales revolucionando una marcha contra el acoso, maltrato, abuso y agravio en el trabajo o en un lugar de estudios.
Una conferencia en el ateneo Ciclistas Unidos, de Zacatecas, algunos miembros de la movilización este 18 de agosto se reunieron para difundir un video y una guía de autoayuda para superar y detectar el mobbing a tiempo.
Los actores como Marco Antonio Galindo, Gaspar Fontana, Carlos López, Ricardo Fígaro, Mario Otero y Diego Chavanne participaron de las dos horas del discurso.
#YoTrabajoSinMob y #NoTrabajoConAbuso son los dos hashtags que llevan adelante para exigir una culminación al acoso y al mobbing.

Ricardo Fígaro (Seta Congelada)
"Cuando me aceptaron y firmé contrato en una academia de locución, el gerente me miraba fijo y no lo hacía con los otros pares míos, el objetivo suyo siempre era yo. No había nada cómodo para mí y yo quería desplazarme como un trabajador como para lo que firmé contrato. Tuve que trabajar incómodo y con muchos problemas sociales encima".

Carlos López (Carnívora Bólido)
"Soy mecánico y me costó trabajar, me costó el puesto que llegué y me costó conseguir el lugar de empleo donde estoy desarrollando mis labores con mis compañeros mecánicos actualmente. Un ex jefe de mi papá -quien también era mecánico solo que ahora dejó el trabajo- me miraba mal, me cuestionaba y nunca pudo creer mi capacidad para llevar adelante el arreglo de un vehículo o de un artefacto doméstico. Arreglé mi problema con una ONG de mi ciudad y hoy día soy mecánico a toda hora".

Marco Antonio Galindo (Brócoli Vigoroso)
"Yo hace seis años fui guardavidas en una playa en Hawaii, y tenía varios compañeros que me miraban con intimidaciones y estaba inseguro para llevar adelante el trabajo de salvavidas en una playa. Siempre he estado sospechando varias cosas de los colegas guardavidas míos. Un día me empujaron a mar adentro para jugarme una broma pesada y no creían que yo sabía nadar".

Mario Otero
"Trabajé seis años en una heladería y con el dueño de la heladería tuve buenos tratos y afinidad hasta que al tercer año cambiaron de domicilio. Me empezó a humillar por mi aspecto y por mi capacidad para estar detrás del mostrador. Al primer año de los maltratos pensaba en que el dueño iba a cambiar porque el cambio de domicilio le afectó, y aparte que yo ganaba bien de la heladería. Luego cobré coraje y renuncié por mi bien y me cansé de los maltratos".

Gaspar Fontana (Mazorcañón)
"Me metieron mis padres de prepo a trabajar en una rotisería a los 16, paea subsidiar la familia pero nunca me aceptaron los demás empleados que estaban trabajando conmigo en esa rotisería. Me querían comer crudo cuando le conté todo esto al dueño del lugar. Yo siempre sostuve que mis padres eran parte de los maltratos y sobrecarga que tenía en esa rotisería".

Diego Chavanne
"En mi escuela pasé bullying por tartamudo y por marcar dudas cuando hablaba. Más a mis 20, me llamaron para un negocio de textil y me pasaba divirtiendo en el trabajo de cortar telas y meterme en la sastrería. Lo mío no es con el trabajo, sino con mis amigos quienes me avergonzaban y me decían que era homosexual por trabajar en un negocio textil".